loѕ eѕpírιтυѕ вυenoѕ no eхιѕтen

A veces, detrás de una masacre, se esconde un hecho paranormal. Algo que conocen Sonia y Carmen, dos amigas. Eran góticas y les molaba el rollo del espiritismo. Pero violaron una de sus reglas: no despertar a los muertos. Así que una noche, a solas, en casa de Carmen, decidieron hacer la ouija para invocar a un espíritu bueno. Por desgracia, también ignoraban que los espíritus buenos no existen. Enseguida comenzó a moverse la flecha formando una frase: "Haced lo que yo os digo o moriréis las dos". Casi sin aliento, las amigas preguntaron asustadas qué quería. "Mataos mutuamente". Abortaron la sesión ouija para expulsar al espíritu, pero cuando notaron que unas manos las asfixiaban, supieron que iba en serio. Carmen fue la más rápida. Tenía un cuchillo en la mano. Sonia murió en el acto.